Y si ya conocemos nuestro destino y aún así lo recorremos como autómatas.
Como un actor que se mete en la piel de su personaje
y que parece no conocer el desenlace de sus conflictos.
Así se comporta el hombre ante sus sueños.
Sabiendo que son irreales y aún así no pudiendo evitar
hacer todo lo posible por intentar alcanzarlos.
hacer todo lo posible por intentar alcanzarlos.
Disfrutar el último número de Opticks, que cumple ya la veintena... Felicidades Opticks!